La prevención es fundamental para reducir el riesgo de incendios en sistemas fotovoltaicos. Prevenir incendios en una instalación fotovoltaica requiere atención en cada fase, desde la instalación hasta el mantenimiento continuo (Las instalaciones defectuosas suelen ser las culpables de los incendios de baterías). Para asegurar una instalación conforme a las normativas, es crucial prevenir la propagación de un incendio desde el generador fotovoltaico hasta el edificio en el que está instalado.
La recomendación más importante para prevenir el riesgo de incendios está relacionada con la fase de construcción de una instalación fotovoltaica. En este primer momento, es fundamental considerar el tipo de material que estará en contacto con los paneles fotovoltaicos. Normalmente, los paneles se instalan sobre una cubierta de tejas o sobre una chapa de acero o aluminio. Los materiales de alta calidad y resistentes al calor tienen una baja probabilidad de propagar incendios. En estos casos, la posibilidad de que los paneles fotovoltaicos propaguen un incendio al edificio es muy baja.
Además, es necesario asegurarse, antes incluso del montaje, de la calidad de las conexiones, del correcto dimensionamiento de los componentes, del buen funcionamiento de los cables y de la elección de los mejores paneles fotovoltaicos resistentes al calor.
Muy importante también el dimensionamiento adecuado: hay que asegurarse de que todos los componentes estén correctamente dimensionados para la instalación específica, lo que ayuda a prevenir sobrecargas.
Hay múltiples causas que pueden desencadenar incendios en una instalación fotovoltaica. Sin embargo, existen varios elementos clave a tener en cuenta para minimizar este riesgo y existen medidas preventivas que pueden ayudar a prevenir cualquier tipo de riesgo y proteger eficazmente cualquier tipo de estructura.
Sin lugar a dudas, el mantenimiento es clave en la prevención. Es crucial realizar un mantenimiento regular para detectar y corregir cualquier problema potencial antes de que cause daños.
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Realizar inspecciones periódicas para detectar y solucionar rápidamente cualquier mal funcionamiento o daño en los paneles. Se recomienda realizar una intervención de mantenimiento en la instalación fotovoltaica al menos una vez al año.
Esto incluye la revisión de la calidad de las conexiones: es importante verificar regularmente el estado de las conexiones, porque si están flojas, pueden generar arcos eléctricos que podrían producir chispas, aumentando el riesgo de incendio.
El mantenimiento regular incluye también un análisis de los cables: los cables son uno de los elementos más importantes y a menudo subestimados. Las conexiones defectuosas son una de las causas más comunes de incendios en sistemas fotovoltaicos. Es esencial que los cables garanticen resistencia a los rayos UV y a altas temperaturas debido a su exposición continua al sol, y deben estar correctamente conectados.
Otro riesgo está asociado con el inverter, que puede sobrecalentarse. Si su sistema de refrigeración no está dimensionado adecuadamente, puede provocar un incendio que se extienda fácilmente a otros equipos cercanos.
El mantenimiento regular y continuo incluye también un control de la producción de energía y una revisión del estado de los módulos fotovoltaicos, para asegurar su buen estado y evitar posibles cortocircuitos.
Instalar sistemas de protección contra rayos para minimizar el riesgo de daños causados por descargas eléctricas. Esto es especialmente importante en áreas propensas a tormentas eléctricas.
Utilizar materiales aislantes térmicos alrededor de los paneles fotovoltaicos para reducir el riesgo de sobrecalentamiento y, por ende, la posibilidad de incendios.
Es esencial mantener los paneles limpios, ya que la acumulación excesiva de suciedad puede causar sobrecalentamiento, lo que podría provocar incendios.
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Para quien desee profundizar sobre este tema, os dejamos el video de la jornada sobre Prevención y Protección contra incendios en Instalaciones Fotovoltaicas organizada por nuestros amigos de CEPREVEN donde se profundizó en aspectos como la prevención y la protección contra incendios, presentando aspectos como las patologías en las instalaciones fotovoltaicas, buenas prácticas en su instalación y mantenimiento, ensayos a gran escala en sistemas de cubiertas e interacción de estos sistemas con los SCTEH de la mano de expertos del sector.